Mi tío cachondo y adicto al sexo siempre tuvo un lado travieso, disfrutando de fantasías salvajes de televisión.Cuando su estrella porno favorita, Leah Luv, visitó, no pudo resistir sus antojos.Esta parodia clásica de los años 70 muestra su encuentro hilarante y caliente, demostrando que la edad no tiene ganas aburridas.